El método en sí
Partiendo de la base que todos tenemos una genética que nos caracteriza, un momento emocional que nos abriga, una alimentación que nos diferencia...lo único que nos une es el clima dentro y fuera de la sala, y aún así, cada uno lo recibe de un modo diferente.
Descubrí que hay una conexión osteomuscular inimaginable.
Todo lo que sucede en la espalda, se transmite a las piernas y viceversa.
La columna debe ser flexible y poseer un buen tono muscular equilibrado para el sostén en la marcha
Las vértebras tienen que estar conectadas, pero no encimadas, los discos intervertebrales deben encontrar su lugar de un modo confortable y así, cumplir su función orgánica.
Este método apunta a todo esto con ejercicios de extensión, flexión ,lateralidad y torsiones combinadas, posibilitando la liberación de la mala tensión que alberga, para poder elongar con facilidad, sin malgastar la energía muscular.
Una vez que la espalda está preparada, podemos comenzar con el trabajo de flexibilidad, rotación, elongación en el tren inferior.
Es muy importante saber cómo ejecutar los ejercicios, desde una mirada biomecánica y desde el orden funcional.
Los músculos tienen una relación entre sí y se debe conocer la misma para la optimización del objetivo final.
Todo tiene un tiempo que hay que respetar.
La clase se lleva a cabo con trabajos individuales, parejas, trío, cuartetos. La ayuda del otro es imprescindible en ciertos casos para nuestros logros.
Aprendiendo a mirar al otro, se incrementa nuestra propia percepción.
Se trabaja la flexibilidad, la fuerza y la elongación, que son 3 áreas que van juntas para lograr un resultado más que impecable.
Como toda creación que apunte a lograr una mejor y plena calidad de vida, el Método Laura Winter permanece empeñado en una búsqueda, una investigación y un perfeccionamiento constantes.